Porque al ser lo más importante tú pasas a segundo, tercero o décimo plano. Sin una mamá o papá fuerte y satisfecho tus hijos crecerán con adultos frustrados.
Porque tu pareja es la causa de tus hijos. Al descuidar la relación de pareja, por darle todo a los hijos se generará un distanciamiento afectivo entre ustedes, los conflictos aumentarán y el ambiente será cada vez más denso en la familia.
Los hijos verán a dos adultos cumpliendo una obligación, no a dos adultos amándose y compartiendo una vida por amor.
Porque das pie a sentimientos de abandono y celos en la pareja.
Porque tus hijos se pueden convertir en pequeños dictadores con un adulto a su servicio.
Porque tus hijos no aprenderán que tú estás para formarlos, no para servirlos.
Porque tú acabaras, con el tiempo, agotada, frustrada y tratando de huir.
Porque si les das todo, te quedarás sin nada cuando se vayan.
Tener hijos es una ardua tarea que implica darles el mayor de nuestro tiempo, aún así nuestros hijos necesitan aprender que nosotros también tenemos necesidades que deben de ser cubiertas. Es importante que sepan que ellos no están a cargo y que nosotros no estamos para servirlos, sino para formarlos.
Cuando educamos a nuestros hijos en una relación basada en la mutualidad; “yo hago por ti, pero tú haces por mí” les enseñamos a compartir, a ser democráticos a vivir en un mundo donde todos debemos darnos la mano, donde nadie está por encima del otro.
Cuando les enseñamos que sus necesidades son importantes, pero que las nuestras también lo son, les enseñamos a vivir en un mundo de equidad y no de abuso.
Por eso es importante que cuides de ti y de tu pareja; si lo das todo te quedas sin nada y la fiesta se acaba. Necesitas cuidar de ti; asigna espacios para hacer actividad física, espacios para convivir con otras personas y en la medida de lo posible no abandones del todo las actividades que te agradan.
Busca nutrir tu relación de pareja. Los sentimientos de abandono y de celos son comunes en muchos matrimonio. La pareja se ve desplazada por la excesiva atención que los niños pueden recibir. Especialmente los hombres, pueden pensar que han perdido el espacio especial que ocupaban en la vida emocional de su esposa, que han sido desplazados por sus hijos. Si tu pareja se siente desplazado o abandonado, lo que sigue serán las reclamaciones, después los conflictos y al final un ambiente familiar carente de amor y alegría en donde todos pierden, sobre todo tus hijos.
No confundas mi mensaje, no es una invitación a desatender a tus hijos, por el contrario busca cubrir sus necesidades físicas, afectivas y educativas. Pero es importante recordar que si quieres una buena familia, empieza por cuidar de ti y de tu pareja, que eso es lo más importante, pues sin ello tus hijos crecerán en un ambiente que con el tiempo se desmoronará.
Les mando un afectuoso saludo y los invito a adquirir en los siguientes links el libro y el seminario en línea bajo demanda de La Transformación del Adolescente: Guía para padres y profesionales donde aprenderán más de este y otros temas.
Dr. Mario Guzmán Sescosse
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